Por los maestros y
maestras especiales
En el transcurso del tiempo, sin pausa y sin retorno,
llegamos a un nuevo setiembre. El pasado 12 de Setiembre el gimnasio se vistió
una vez más de fiesta para conmemorar, el “DÍA DEL MAESTRO”, en recordación al
“Gran Maestro de América”, Don Domingo Faustino Sarmiento.
Este día fue doble nuestro motivo de reunión:
conmemorar a un hombre de espíritu sin igual y brillante intelecto y además
homenajear a las personas que, como él, dedican gran parte de su vida a la
formación de niños y jóvenes. El canto de los himnos, las palabras alusivas y la
ofrenda floral fueron el marco del acto desarrollado con un profundo sentir
patriótico en honor al padre del aula...
Luego de entonar a viva voz el himno a Sarmiento, pudimos disfrutar de una excursión musical. Con la imaginación nos subimos al “Tren de la Educación” y recorrimos el maravilloso mundo de la Sabiduría… Fue así que pasamos por las distintas estaciones… en cada una de ellas los entusiastas alumnos dejaron un claro mensaje que con diversas representaciones pudieron transmitir y compartir con todos los presentes...
El recorrido comenzó con los más pequeñitos quienes con expresivos movimientos y con una espectacular batucada de los alumnos de sexto y guiados por su profesor Cristian García transmitieron a sus Seños un cariño muy particular…
Y casi sin darnos cuenta llegamos a la Primera Estación,
Sonrisa y Diversión… y fue en esta estación que los alumnos de sexto
impregnaron diversión, colorido y entusiasmo, ingredientes indispensables para
llevar adelante una sana convivencia con los pasajeros de nuestro tren…
El viaje prosiguió… y los alumnos de segundo fueron los
encargados de representar la Segunda Estación: La Inspiración… Fue como ofrecer
una varita mágica a los niños que entre imaginación y realidad, los pequeños supieron expresar célebres frases para sus maestras...
En la Tercera Estación, llamada La Reflexión, palabras extrañas y relacionadas con el mundo cibernético invadieron nuestro viaje… pero fueron los
alumnos de cuarto que nos dieron ese toque de tranquilidad y nos enseñaron a
instalar un programa informático muy particular: El Amor… Eso sí, gratis y
libre de virus…
Las seños recibiendo un presente...
La Cuarta y última Estación tuvo un matiz particular… Fue la
estación donde todos queríamos llegar… La Luz… estación que amerita un capítulo especial...
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