Por Ana María Mellaré
El 31 de mayo fue un día bello y especial. Grandes muñecos que repesentaban a la Madre Antonia y al Padre Claret fueron los protagonistas del día y se llevaron toda la atención de los alumnos. En la Capilla, para resguardarnos del frío día, nos reunimos por niveles y disfrutamos un momento de gozo y de alabanza al Señor dando gracias por los Dones que recibimos a través de la obra de las Misioneras Claretianas. Por supuesto recordamos especialmente a todas las hermanas que pasaron por Mendoza, algunas destinadas a otros lugares y otras que gozan de la vida eterna. En este sitio se llevó todos los recuerdos la queridísima Madre Concepción cuya españolísima vocecita parecía acaparar toda la Capilla. Las hermanas más jóvenes de la comunidad, Judith, Carolina y Mayra fueron las personificaciones de los muñecos y la voz de los Fundadores recordando sus ideales y repitiendo la Palabra. Los niños felices escuchaban y sonreían al tiempo que mostraban todas las producciones que sobre el tema trabajaron con sus catequistas. Antes de terminar recibimos el regalo de 9no año para cada aula: se trataba de una hermosa reproducción fotográfica de nuestros Fundadores. Disfrutemos las fotos y alabemos al Señor por esta Gracia Misionera en los 75 años en Mendoza.
Los primeros años de vida son los que forman el futuro de las personas, los que alientan sus motivaciones y marcan el principio de su desarrollo intelectual y motriz. La educación organizada y metodológica en esta etapa de la niñez permite un crecimiento más completo de los pequeños y facilita su inserción en la escuela primaria. A la destacada maestra Rosario Vera Peñaloza debemos su difusión en nuestro país.
Desde este espacio virtual queremos desearles un feliz día a todas las maestras jardineras que, con voluntad, esfuerzo y dedicación, trabajan por una infancia mejor.
Por la seño Ángeles Pelayes
